viernes, 13 de marzo de 2015

CUMPLEAÑOS


CASI EN PRIMAVERA

Yo llegué a este mundo cuando ya los almendros estaban florecidos y las abejas se ponían las botas en sus ramilletes. En las postrimerías del invierno y con la primavera pidiendo paso. Tengo entendido que me hice bastante de rogar, y que mi pobre madre me sufrió durante todo un domingo que imagino muy largo para ella. Pero finalmente llegué.
De eso hace...¡un montón de años!
Lo que sigue es el primer regalo que acabo de recibir.  Viene de lejos, cargado de cariño.


¿Qué cuántos años tengo?
¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento! La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso o lo desconocido... Pues tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos
¡Qué importa cuántos años tengo! ¡No quiero pensar en ello! Pues unos dicen que ya soy viejo otros "que estoy en el apogeo". Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.
Los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.
Ahora no tienen por qué decir: ¡Estás muy joven, no lo lograrás!... ¡Estás muy viejo, ya no podrás!... Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo.
Tengo los años en que los sueños, se empiezan a acariciar con los dedos, las ilusiones se convierten en esperanza.
Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada, y otras... es un remanso de paz, como el atardecer en la playa...
¿Qué cuántos años tengo? No necesito marcarlos con un número, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones truncadas... ¡Valen mucho más que eso!
¡Qué importa si cumplo cincuenta, sesenta o más! Pues lo que importa: ¡es la edad que siento!
Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos. Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.
¿Qué cuántos años tengo? ¡Eso!... ¿A quién le importa? Tengo los años necesarios para perder ya el miedo y hacer lo que quiero y siento!
Qué importa cuántos años tengo o cuántos espero, si con los años que tengo, ¡¡aprendí a querer lo necesario y a tomar sólo lo bueno!!





Y éste, el segundo:



Google me ha dedicado este doodle especialmente hecho para mí  ¡¡Gracias a los dos!!

miércoles, 11 de marzo de 2015

REFLEXIONES EN UN 11-M

Pie Jesu

En medio de tanta barbarie como nos rodea a diario, con la amenaza del fanatismo revoloteando sobre nuestras cabezas...
Ese fanatismo de los que ponen bombas, decapitan, masacran a cristianos, queman iglesias, destruyen el patrimonio de una cultura que no sienten como suya (¿acaso son capaces de sentir algo?) que nos fue legada hace milenios, que van sembrando el terror minuto a minuto, ante la pasividad silenciosa de medio mundo, ese mundo del que proceden y que no es consciente del horrible futuro que les espera...
Esos fanáticos que secuestran, violan, trafican con los órganos de sus víctimas para financiarse, ante la estúpida corrección política de los gobiernos occidentales, el otro medio mundo, que no son capaces de agarrar el toro por los cuernos y van dejando que el enemigo se nos crie en casa...

Pues en medio de todo ésto, y en un día como hoy de tristísimo recuerdo, he querido encontrar algún consuelo, algún sosiego en la música.
Podría haber elegido infinidad de temas, pero me ha apetecido reivindicar la tradición cristiana, esa que forma parte fundamental de nuestras raíces, que distingue especialmente a Europa del resto del mundo y que yo asumo totalmente, con sus horrores y errores del pasado, pero que nos han traído hasta este presente con unos valores infinitamente mejores que otros, por más que una sociedad ultraconsumista y de laicismo radical trate de acabar con ellos.

Este Pie Jesu de Andrew Lloyd Webber es de tal belleza que creo que cualquiera que tenga una simple brizna de sensibilidad tiene que emocionarse. 
¡Si esos fanáticos a los que me he referido tuvieran la oportunidad de oirlo!




Pie Jesu, Pie Jesu
Pie Jesu, Pie Jesu
Qui tollis
 pecatta mundi donna eis requiem 
Donna eis requiem 
Pie Jesu, Pie Jesu 
Pie Jesu, Pie Jesu 
Qui tollis pecatta mundi donna eis requiem 
Donna eis requiem 

Agnus Dei, Agnus Dei 
Agnus Dei, Agnus Dei 
Qui tollis pecatta mundi donna eis requiem 
Donna eis requiem 
Sempiternam 
Sempiternam 
Sempiternam





domingo, 8 de marzo de 2015

¡¡¡FELICIDADES, CHICAS!!!

Día Internacional de la MUJER Trabajadora

Que son todas...